No es sino el verde el color de la envidia.

lunes, 4 de julio de 2011

Aullidos.


No me asustan los lobos en llamas.
Les calvaría cucharas hasta matarlos.
Las noches manchadas de sangre
Viscosa y roja…
Roja.
Me resultan erógenas y fascinantes.
Los aullidos hacen vibrar en lo insólito
El silencio de mis hilos.
Comería lobos en llamas a diario,
Para escuchar el crujir de sus huesos
Entre mis dientes afilados.
Y que me dejasen tranquilo con mis miedos.
Rojos.